Desde hace un tiempo, Miguel Almendra se ha puesto al servicio de Sidrería El Corralín para, con toda la experiencia que ha ido acumulando durante años en el sector hostelero, hacer de esta gastro-sidrería un lugar de referencia para aquellos que busquen una oferta basada en la calidad.
La clave de todos los platos es el producto asturiano ecológico cocinado con el cariño que lo hacían nuestras abuelas, sólo así se puede conseguir que el resultado sea impecable: comida casera con toques de actualidad.
Sidrería El Corralín es un lugar acogedor con una decoración puramente asturiana que simula un clásico corral de pita. Un ambiente perfecto para disfrutar de su apuesta: producto fresco del día, ecológico y de proximidad.
La parrillada de verduras ecológicas es uno de los platos estrella de la carta, que también incluye ensaladas, platos para compartir como las cazuelas de huevos ecológicos con picadillo o con jamón, pescados y mariscos del Cantábrico del día, que van de la rula a la mesa, arroces en distintas elaboraciones, y pucheros, entre los que destaca la fabada asturiana realizada con faba fresca y compango asturiano. Además, se pueden degustar diferentes carnes de ternera asturiana y postres típicos que van desde el arroz con leche de Porrúa de Llanes hasta la famosa tarta artesana de la Güela.
Con una presentación de los platos muy cuidada, Sidrería El Corralín cuenta con comedor y terraza todo el año, y ofrece un servicio excelente en los menús especiales de comidas familiares o de empresas.
La buena sidra, siempre de los mejores llagares, es otra de las señas de identidad de Sidrería El Corralín que, junto a su hermano mayor Sidrería La Viliella, cuenta con un equipo de 12 trabajadores volcados en ofrecer el mejor servicio y atención a sus clientes. Ambos locales forman parte de la Asociacion de Sidrerías de la calle Gascona que tan meritoria labor viene realizando por la promocion de El Bulevar de la Sidra en la gastronomía y en la bebida regional.